Árbol de Agua
Culebra roja deslizándose hasta mí
Silueta entre la bruma matutina
Sombras moradas la protegen de la luz
árbol solitario, deshojado
Tras de ti están los cráteres rojos
Ojos de culebra que miran
Desde lejos, bajo el agua
Al acecho de una víctima más
Aliento de culebra roja
Que se desliza entre las olas
Entre el líquido embriagante, trampa mortal
Ojos que desde el árbol de agua, miran
De Corazón pintado
Estrella Blanca
Para White Star de Tom Pecore Weso
Guía desde las bóvedas azules
Que cubre amarillos desiertos
Con blanco resplandor
Cielo suave
Donde habitan
Otros cuerpos de la noche
Pintora de cactus
Guardiana de la vida
El blanco nace de tus entrañas
Luminosidad que abraza
Cada ser
Que regala vida
Guía nocturna
Protectora del desierto
que desde cielo, nace
Yanga (fragmento)
Yanga, Yanga, Yanga
Yanga, Yanga, Yanga,
Hoy, tu espíritu invoco
Aquí, en este lugar.
Este, este es mi poema para Yanga,
Mandinga, malanga, bamba.
Rumba, mambo, samba,
Palabras llegadas desde África.
Esta, esta es mi respuesta para Yanga,
Candomble, mocambo, mambo,
Candomble, mocambo, mambo,,
Hombre libre verazcruzano.
En 1570
Llegaste al puerto de Veracruz,
Encadenado como muchos,
Escapaste de la esclavitud.
Palenque, rumba, samba,
Yanga, Yanga, Yanga,
Espíritu indomable,
Noble hombre de África.
En 1609
luchaste por la libertad,
Hasta tus puertas llegaron y
no pudieron entrar.
Mandinga, malanga, bamba…
De Conjuro
Gitanos en Chicago
Para Carlos Cumpién y Cynthia Gallaher
La música está llena de duende esta noche
El poeta tejano, el armadillo,
vive poesía en movimiento
Y lumbre cegadora in crescendo
Andalucía en las calles de Chicago
Incandescencia sin fin
Clap, clap
Clap, clap las palmas cantan
Gitanos en Chicago
Poesía de arcos perfectos
Rojo a media luz
Estética en movimiento
Las palmas capturan la poesía
14 abriles, ritmos poéticos,
rebozos y guitarras
Lumbre vibrando en los pies
La música está llena de duende esta noche
De ritmo en el centro
Clap, clap
Clap, clap las palmas cantan
De Conjuro
Caminata vespertina en el Nelson-Atkins
Para Ana Mendieta
Los espacios están vacíos de ti, Ana
Tu cuerpo de fuego, ausente
Las texturas a las que tus manos
Dieron vida, no existen
Continúo la caminata vespertina
Entre las galerías
En silencio, buscándote.
De Conjuro